Carta del Equipo de Presidencia Nacional a todos los miembros delMovimiento Familiar Cristiano

La Caridad de Cristo nos urge 2 Cor 5, 14

A pocos días de la celebración del Nacimiento de Jesucristo, gran revelación del amor apasionado de Dios a la humanidad, desde el Equipo de Presidencia Nacional, queremos dirigirnos a todos los miembros de nuestro movimiento para daros las gracias y felicitaros por todas las iniciativas que a favor de los más necesitados estáis llevando a cabo, individualmente y como miembros del MFC, en los distintos servicios o desde los Equipos de Presidencia diocesanos. Desde que la crisis económica en España empezó a hacerse notar, habéis intentado vivir la caridad con los que más sufren sus consecuencias, para salir al paso de esta grave situación que tantas personas padecen. Nos sentimos muy orgullosos de todo el bien que estáis haciendo. Queremos felicitaros y, sobre todo, queremos dar gracias a Dios por vuestra generosidad. El motivo de estas líneas es exhortaros a vivir la solidaridad y el compromiso cristiano ante aquellos que han visto reducido su salario o han perdido su trabajo, que carecen de lo necesario para vivir. A continuación os ofrecemos una iniciativa muy concreta, para que, con la ayuda de Dios, se realice allí donde sea posible y veáis su conveniencia.

Quizás no está en nuestra mano la solución de todos los problemas y sufrimientos de los hombres de nuestra época, pero sí que podemos hacer mucho bien. Mucho más del que podemos imaginar o pensar. Decía la beata Teresa que “a veces sentimos que lo que hacemos es tan solo una gota en el mar, pero el mar sería menos si le faltara esa gota”. Todo lo que hacemos es importante y necesario, aunque nos parezca pequeño e insignificante; a los ojos de Dios no lo es. Por eso, desde el Equipo de Presidencia Nacional, pensamos que si cada equipo de nuestro Movimiento se compromete con una familia concreta, muchas serían suficientemente atendidas, y en el MFC y en la sociedad se crearía un espíritu de caridad. Con un pequeño esfuerzo por parte de los equipos muchas personas podrían vivir con más dignidad, dándoles alimentos, colaborando en el pago de la hipoteca, comprando juguetes a sus hijos…
Os proponemos concretamente “la adopción” por cada equipo-grupo de una familia para ayudarla económicamente en lo que necesite, empezando por nuestro propio movimiento si en él se dan estos casos, y si no buscad a esa familia a la que ayudar por medio de las parroquias, Cáritas etc.

Todos los cristianos están llamados a ser un signo de esperanza para los demás. Ayudando a las familias saldremos de la crisis. Por eso queremos elevar nuestra oración a la Sagrada Familia de Nazaret para que nos ayuden a caminar por la senda de la justicia y de la caridad, sintiendo como propios “los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de los hombres de nuestro tiempo, sobre todo de los pobres y de cuantos sufren” (Gaudium el Spes 1). Que Dios bendiga vuestra generosidad. Recibid un saludo afectuoso del Equipo de Presidencia.

Toledo, 10 de diciembre de 2012
Fiesta de Nuestra Señora de Loreto